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Maestra Sandra Reynoso
Coach de Vida y Sexualidad
El dúo de la felicidad, la serotonina y la dopamina, son neurotransmisores que intervienen en tus estados de ánimo y emociones. La dopamina se produce en tu cerebro y regula la emoción, la motivación y la sensación de placer, es la hormona de la recompensa. La serotonina también se produce en el cerebro y es una hormona reguladora de los estados de ánimo, se le conoce como la hormona de la calma. La dopamina y la serotonina son, según diversos estudios, sustancias incompatibles: cuando nuestro cuerpo segrega una, reduce la otra.
Por ejemplo, una noche de sexo te puede proporcionar placer y una relación duradera te puede proporcionar felicidad. Una produce una alegría eufórica y la otra, una felicidad serena.
El endocrinólogo Robert Lustig, en su libro, The Hacking of the American Mind, enfatiza que tenemos una dependencia a la dopamina, es decir, al placer. Somos una sociedad hedonista y no necesariamente feliz.
Para estar bien no sólo tienes que cuidar la salud con una buena alimentación y hacer ejercicio, además tienes que vigilar el peso, tu nivel de estrés, el consumo de drogas o fármacos, el abuso del alcohol, la falta de sueño, el abuso de videojuegos y apuestas, el abuso de la sexualidad, de la pornografía, el exceso de comida y la práctica excesiva de deportes extremos.
La liberación de dopamina te motiva a asumir riesgos y te hace sentir bien, el problema es que al mismo tiempo te puede hacer adicto al placer, ya sea jugando con el celular, con una máquina tragamonedas o bien subido en una patineta.
Analizar el comportamiento de la dopamina es muy complejo, está relacionada con la atención, motivación, adicción, lo que es un hecho es cuanta más dopamina liberamos en un sector específico de nuestro cerebro, llamado la vía de la recompensa, más placentera es la sustancia o la experiencia que estamos viviendo.
La psiquiatra y autora del libro Dopamine Nation, Anne Lembke, dice que en los últimos cinco años hay una tendencia entre los ejecutivos en Silicon Valley de hacer ayuno de dopamina, pensaron que es necesario hacer una dieta de dopamina en períodos de tiempo específicos, para restringir los comportamientos que te provocan mucho placer y que pueden volverse tóxicos y adictivos. El objetivo del ayuno de dopamina es aislarse de los estímulos nocivos del mundo moderno, como el exceso de conexión tecnológica.
Si decides hacer el ayuno de dopamina, te puedes sentir más relajado y más enfocado en el presente, en el aquí y el ahora, lo que te permitirá estar más consciente de tu propio entorno y poder actuar más libremente.
El tiempo de práctica varía según tu nivel de adicción respecto al manejo de Internet y la tecnología. Por actividades laborales y personales a veces es difícil desapegarte totalmente, los científicos recomiendan implementar el ayuno en las noches, los fines de semana y en vacaciones.
Puedes organizarte así:
Una coach como yo, puede ayudarte a trabajar en ti y en el proceso de ayuno de dopamina, consulta mi sitio https://sandrareynoso.com/ y agenda una cita.
Bibliografía: